7 junio, 2025
Lo Nuevo México y el Mundo

Tensiones entre Trump y Zelensky complican negociaciones de paz en Ucrania

Washington / Kiev, 23 de abril de 2025 — Las posibilidades de un alto el fuego en Ucrania se debilitaron este miércoles tras el rechazo del presidente Volodímir Zelensky a una propuesta de paz impulsada por Estados Unidos, lo que provocó una nueva confrontación verbal con el presidente Donald Trump. La propuesta incluye una cláusula especialmente polémica: el reconocimiento de Crimea como territorio ruso.

Una propuesta condicionada

La iniciativa, defendida por el vicepresidente estadounidense J.D. Vance en declaraciones desde la India, plantea congelar las líneas de frente en “un punto cercano al actual” y alcanzar un acuerdo diplomático duradero. Trump ha insistido en que ambas partes deben hacer concesiones territoriales para detener el conflicto, e incluso ha amenazado con que EE.UU. se retire del proceso si no se llega a un entendimiento.

Zelensky, por su parte, calificó la sugerencia de reconocer la ocupación rusa de Crimea como inaceptable. “No hay nada que discutir: es nuestra tierra, la tierra del pueblo ucraniano”, declaró el presidente ucraniano, recordando que la Constitución de su país prohíbe ceder territorio. También compartió un comunicado anterior del gobierno estadounidense en el que se condenaba la anexión rusa de Crimea en 2014, como forma de subrayar la incoherencia de la postura actual.

Acusaciones cruzadas

Desde su red Truth Social, Trump acusó a Zelensky de prolongar la guerra con sus “declaraciones incendiarias” y afirmó que Ucrania podría terminar perdiendo más si insiste en mantener su posición. “Puede tener paz o puede luchar durante otros tres años antes de perder todo el país”, escribió. También cuestionó por qué Ucrania no defendió Crimea en 2014, aludiendo a la administración de Barack Obama.

En respuesta, Zelensky agradeció públicamente el respaldo de países aliados y enfatizó la necesidad de un alto el fuego “inmediato, total e incondicional”, reafirmando que Kiev no cederá territorios como parte de un eventual acuerdo.

Cancelación de reuniones y efectos diplomáticos

Los desacuerdos han tenido repercusiones en la agenda diplomática. Una reunión multilateral prevista en Londres entre altos funcionarios de Estados Unidos, Reino Unido, Francia, Alemania y Ucrania fue suspendida de último momento, luego de que el secretario de Estado Marco Rubio y el enviado especial Steve Witkoff cancelaran su participación.

Mientras tanto, la Casa Blanca confirmó que Witkoff viajará esta semana a Moscú para reunirse por cuarta vez con el presidente ruso Vladimir Putin.

 

Lectura de Fondo

La escalada verbal entre Trump y Zelensky refleja más que una diferencia táctica: expone un choque de narrativas sobre cómo terminar una guerra sin comprometer principios fundamentales. La presión de Washington para alcanzar un acuerdo pragmático, incluso con concesiones territoriales, contrasta con la línea dura de Kiev en defensa de su soberanía.

La idea de que Crimea ya es una causa perdida —un planteamiento que flota entre bastidores en el discurso estadounidense— busca cerrar un capítulo incómodo del conflicto. Pero para Ucrania, asumir esa pérdida sería sentar un precedente contrario al derecho internacional y al equilibrio geopolítico europeo.

Las advertencias de Trump sobre abandonar el proceso de paz si no hay avances apuntan a un uso estratégico del liderazgo estadounidense como mediador: ya no como garante de principios, sino como facilitador de acuerdos “posibles”, aunque impliquen retrocesos. En ese marco, la suspensión de las reuniones en Londres no solo es logística, sino sintomática: el margen para consensos duraderos se estrecha si las posiciones de fondo siguen siendo incompatibles.

Por ahora, la línea de fuego no solo está en el frente, sino también en el lenguaje: cada declaración moldea los contornos de lo negociable, y cada silencio define los límites del futuro acuerdo.