Imagen – Will Mu, Pexels
El gobierno de Nuevo León aprobó una transformación en el modelo de pago para el transporte público metropolitano. A partir del 23 de junio, el esquema de compensación a los transportistas dejará de basarse en los kilómetros recorridos y comenzará a calcularse según el número de pasajeros transportados por kilómetro. La medida fue avalada en sesión de la Junta de Gobierno del Instituto de Movilidad y Accesibilidad (IMA) y representa un giro en la política de movilidad estatal.
Las autoridades justificaron el cambio señalando que el modelo anterior, implementado en marzo de 2023, resultó ineficiente y costoso, ya que el Estado asumía todo el riesgo operativo y financiero, sin mejorar sustancialmente el servicio. Se espera que el nuevo sistema incentive a los concesionarios a mejorar la calidad del servicio, conservar las unidades y optimizar sus recorridos, ya que sus ingresos dependerán directamente del número de usuarios transportados.
Impacto para transportistas y usuarios
Entre los cambios destacados se encuentra la posibilidad de que los operadores adquieran las unidades que conducen, lo que reforzaría su compromiso con el mantenimiento y desempeño de los vehículos. Además, se contemplan subsidios estatales para facilitar el arrendamiento de camiones, con el fin de evitar incrementos en la tarifa, actualmente fijada en 15.60 pesos por viaje.
Se estima que el cambio de esquema se implemente progresivamente hasta finales de 2025. Autoridades del IMA y del gobierno estatal aseguran que este nuevo enfoque permitirá una operación más eficiente y mayor control sobre evasiones de pago, además de reducir tiempos de espera para los usuarios.
Sin embargo, voces como la del Consejo Cívico han alertado sobre la necesidad de transparencia en la aplicación de estas reformas, así como del cumplimiento de los lineamientos de gobernanza. El organismo ciudadano cuestionó que el gobernador y el secretario de Movilidad no han presidido las sesiones del IMA en meses recientes, lo que, consideran, resta prioridad al tema.
Del pasado al presente: evolución del transporte en Monterrey
El sistema de transporte en Nuevo León ha atravesado diversas etapas desde la introducción de las “Julias” —los primeros autobuses organizados en la ciudad durante los años 20— hasta los actuales camiones verdes con Wi-Fi y accesibilidad universal.
Durante las décadas de 1960 y 1970, rutas como la 25 y la 34 se volvieron emblemáticas, con unidades más grandes y visibles, apodadas por los usuarios como los “Rayados” debido a su diseño en azul y blanco. La primera Central de Autobuses fue inaugurada en 1969, y hoy es una de las más importantes del norte del país.
En materia de tarifas, el costo del transporte se ha elevado de los 5 centavos en los años 30 hasta los 13 pesos en 2015, y 15.60 en la actualidad. Paralelamente, se han introducido medios de pago digitales como la app “Me Muevo” y “Urbani”, que han sustituido gradualmente a la Tarjeta Feria.
Lectura de fondo
Más allá del pasaje: gobernanza, incentivos y el reto de moverse mejor
El cambio en el modelo de pago del transporte público en Nuevo León refleja un intento por corregir deficiencias estructurales con base en incentivos de mercado. Pero la efectividad de esta transición no dependerá sólo de la fórmula económica aplicada, sino de su gobernanza. La falta de participación de figuras clave en las sesiones del IMA y la ausencia de un plan estratégico integral debilitan el impacto potencial de las reformas. Mientras los operadores ganan autonomía y se busca eficiencia, el desafío persiste: garantizar que el transporte funcione como un derecho urbano y no como una simple transacción financiera.