Apodaca, N.L., 17 de mayo de 2025 — Un incendio al interior de una de las plantas de la empresa Whirlpool, ubicada sobre la avenida Miguel Alemán en el municipio de Apodaca, provocó la evacuación de al menos 100 personas y generó una intensa movilización de cuerpos de emergencia este viernes por la tarde.
Evacuación preventiva y control del fuego
El siniestro, que se registró poco antes de las 14:00 horas, generó una densa columna de humo negro visible desde varios puntos del municipio, lo que alarmó a trabajadores y automovilistas que transitaban por la zona. Una brigada interna de seguridad activó los protocolos de evacuación y alertó a las autoridades.
Elementos de Bomberos y de Protección Civil estatal y municipal acudieron al lugar para sofocar el fuego, que afectó una sección del patio de la fábrica. No se reportaron personas lesionadas ni víctimas, únicamente daños materiales. La vialidad sobre Miguel Alemán se vio parcialmente afectada debido al operativo.
Las autoridades informaron que se llevará a cabo un peritaje para determinar las causas del incendio, aunque hasta el momento no se ha confirmado el tipo de material que originó el fuego.
Whirlpool en Nuevo León
La empresa Whirlpool cuenta con tres plantas de producción en el municipio de Apodaca: SUPSA, Horizon y Whirlpool Plastics. La planta Horizon, donde se presume ocurrió el incidente, produce lavadoras y componentes, mientras que la planta de plásticos fabrica piezas para marcas como Whirlpool, Maytag, KitchenAid, entre otras. SUPSA es la planta con mayor volumen de producción y emplea a más de 2,500 personas.
En fechas recientes, otro incendio fue registrado en una empresa del Parque Industrial Avante, también en Apodaca, donde 25 empleados fueron evacuados sin incidentes mayores.
Lectura de Fondo
El incendio en la planta de Whirlpool pone de relieve la relevancia de los protocolos de seguridad industrial en zonas con alta concentración manufacturera. Apodaca, como polo económico clave en el noreste del país, aloja cientos de empresas que operan bajo ritmos acelerados de producción y movilidad logística. Esto implica retos constantes tanto para la seguridad interna de las empresas como para la capacidad de respuesta de los servicios municipales y estatales.
La atención pública ante estos sucesos suele concentrarse en la visibilidad inmediata del evento —como las columnas de humo o los cierres viales—, pero también abre paso a preguntas sobre los estándares de prevención, las rutinas de inspección y los mecanismos de comunicación ante emergencias.
Sin que existan aún elementos para determinar responsabilidades o fallas específicas, el hecho refleja una constante en escenarios industriales modernos: la convivencia entre eficiencia operativa y el manejo de riesgos. En este contexto, la reacción coordinada entre brigadas internas y cuerpos de emergencia permite dimensionar la importancia de contar con sistemas articulados para responder a eventualidades sin que escalen en daño humano o material.
Más allá del caso puntual, estos incidentes alimentan la conversación pública sobre la convivencia entre desarrollo económico y gestión de seguridad, y refuerzan el interés social en conocer cómo se equilibran ambos factores en zonas de crecimiento acelerado.
